Si eres deportista, seguro que quieres saber cuales son las lesiones por sobreentrenamiento. Vamos a hacer una enumeración de las más frecuentes que solemos tratar en clínica privada.
La causa de este tipo de lesiones es una carga excesiva de entrenamiento o una mala gestión de la misma, caracterizada en la mayoría de casos por descansos insuficientes y una mala progresión de esta carga en el tiempo.
Son dos frases muy fáciles de escribir pero son difíciles de realizar de forma correcta ya que va a depender del tipo de entrenamiento que tengamos, nuestro tiempo y nuestro estado de forma actual. Tendremos que ir valorando y adaptando las cargas en función de los objetivos y los parámetros que acabo de explicarte.
– Dolor muscular/calambres/agujetas: principalmente debido a una mala recuperación, ya sea por el poco tiempo de descanso entre sesiones de entrenamiento, una mala nutrición e hidratación y un mal descanso.
– Tendinitis: los tendones se lesionan principalmente por dos mecanismos, por recibir una carga demasiado baja que haga que la estructura del tendón (colágeno, células tendinosas, etc.) pierda calidad y se haga un tendón más débil, y la más común, por recibir una carga desmesurada que no pueda tolerar. Por eso, es de gran importancia hacer deporte de forma adaptada y progresiva, respetando los procesos de recuperación de los tejidos de tu cuerpo.
– Fracturas de estrés: estas ocurren de forma similar a las tendinitis por sobrecarga. Si sometemos a demasiados impactos al hueso, como por ejemplo los huesos calcáneo y tibia cuando hacemos running, junto a una mala gestión del descanso (por ser insuficiente), vamos a hacer que esos huesos no asimilen bien todo el trabajo al que se les está sometiendo y acaben por desarrollar fracturas de estrés.
– Periostitis tibial: es la inflamación del tejido superficial que recubre a los huesos. La periostitis ocurre cuando se inflama ese tejido debido a un aumento considerable en la carga de entrenamiento. Será importante gestionar adecuadamente la carga de entrenamientos y modificar posibles factores de riesgo de lesión como pueda ser la pisada del pie, desequilibrios musculares (importante protagonismo en esta patología del tibial posterior y sóleo), etc.
– Fascitis plantar: ocurre cuando se somete a la fascia plantar a fuerzas de tensión y tracción excesivas. Como respuesta a esas cargas excesivas, la fascia plantar tiende a inflamarse y a provocar dolor.
– Síndrome de la cintilla iliotibial: provocado por una excesiva compresión de la banda iliotibial contra el cóndilo externo del fémur. Esto hace que se irrite el tejido y por consiguiente que se inflame y duela. Importante adaptar las cargas de entrenamiento y modificar factores de riesgo de lesión, como, por ejemplo, una mala estabilidad lumbopélvica.
Estos son los casos más habituales de lesiones por sobreentrenamiento que vemos en Clínica Najarro. Si crees que puedes estar padeciendo alguna de ellas, estaremos encantados de ayudarte a solventarlas.